Entras en una habitación decorada con tonos claros y muebles antiguos y artículos que podrían haber salido de la casa de tus abuelos. Estos objetos antiguos se encuentran mezclados con modernos aparatos eléctricos y, enseguida, te llama la atención.

Este tipo de decoración se denomina vintage y es es una tendencia que ha ganado en popularidad en los últimos años, no únicamente en la decoración de viviendas, sino también en restaurantes y establecimientos.

Se caracteriza por ser un punto intermedio entre lo antiguo y lo moderno y por el romanticismo y el clasicismo de sus ambientes.

¿Te apetece decorar tu vivienda con este estilo tan característico? Te contamos cómo hacerlo.

1. Muebles

Los muebles son esenciales en la decoración vintage. Pueden ser de dos tipos:

– Antiguos y recuperados

– Modernos y envejecidos artificialmente.

Lo importante es que parezcan antiguos.

2. Color

Los colores predominantes en la decoración vintage son los colores pastel, como el aguamarina, blanco, rosa claro, azul o coral. Asimismo, el papel pintado es uno de los elementos que destaca en este tipo de decoración.

3. Objetos retro

En tu estancia vintage no pueden faltar objetos antiguos, como un teléfono antiguo, una máquina de escribir, radiocasetes, tapetes de ganchillo…

Dentro de esta tendencia tienes un gran abanico de posibilidades. El principal objetivo es saber fusionar elementos antiguos con modernos para conseguir un equilibrio que llene a nuestro hogar de un ambiente acogedor sin llegar a ser anticuado. Deja volar tu imaginación.